La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Castilla-La Mancha valora positivamente la decisión de la Consejería de Agricultura de Castilla-La Mancha de revisar algunos aspectos de los programas nacionales de vigilancia y de erradicación de las enfermedades de los animales ante la favorable evolución de los indicadores epidemiológicos.
La resolución, publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha, establece la frecuencia y los animales susceptibles de chequear, en virtud de la prevalencia de las enfermedades a nivel comarcal y provincial, referidas a la Tuberculosis Ovina, la Tuberculosis Caprina y la Brucelosis Bovina, Caprina y Ovina.
Desde la Organización se congratulan de que la resolución recoja la mejora de la sanidad de la cabaña ganadera de la región, cuya constatación conlleva una mayor seguridad en los mercados.
ASAJA destaca que la política sanitaria animal ha dado sus frutos y esta norma se amolda a la realidad existente, aclarando la situación de las actuaciones de los ganaderos ante las campañas sanitarias y fijando el desarrollo de estas campañas de saneamiento, que se deben realizar en consonancia con la situación sanitaria de la zona de ubicación de las explotaciones.
Por ello, la organización entiende que es un “paso adelante” por parte de la Consejería de Agricultura para mejorar la sanidad animal de los rebaños.
En ese sentido, creen muy adecuada la suspensión de la vacunación de brucelosis ovina-caprina en determinadas comarcas y la división en dos zonas de incidencia (alta y baja prevalencia) de la tuberculosis bovina y brucelosis ovina-caprina. Esto significa ajustar la aplicación de la sanidad animal a las condiciones específicas de cada zona, disminuyendo de una forma justificada los tratamientos a los animales.
Por último, resaltan la necesidad de mantener un sistema de vigilancia de sanidad animal rápido, ágil y eficiente.
Zonas y provincias
En el caso de la Brucella Mellitensis, se suspende la vacunación en las explotaciones ovinas y caprinas de todas las comarcas ganaderas de las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara. También se suspende en las comarcas de Almadén, Alcázar de San Juan, Horcajo de los Montes, Manzanares, Piedrabuena, Valdepeñas y en Villanueva de los Infantes, en la provincia de Ciudad Real, y en las toledanas de Belvís de la Jara, Los Navalmorales, Ocaña, Quintanar de la Orden y Yuncos.
Dicha resolución contempla como Zonas de Baja Prevalencia frente a la Brucelosis Ovina y Caprina a la totalidad de los territorios de las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara, a las comarcas ganaderas de Almadén, Horcajo de los Montes, Manzanares, Piedrabuena, Tomelloso, Valdepeñas y Villanueva de los Infantes, en Ciudad Real, y a las de Belvís de la Jara, Los Navalmorales, Ocaña, Quintanar de la Orden y Yuncos, en Toledo. En estas zonas se debe realizar un chequeo anual en una parte representativa del censo de animales.
En base a esta resolución, son Zonas de Alta Prevalencia frente a la Brucelosis Ovina y Caprina las comarcas ganaderas ciudadrealeñas de Calzada de Calatrava, Almodóvar del Campo, Ciudad Real y Malagón y las toledanas de Almorox, Gálvez, Madridejos, Mora, Oropesa, Talavera de la Reina, Toledo y Torrijos. En estas zonas, se hará un cheque anual al cien por cien del censo de animales.
Tuberculosis Bovina
Dicha resolución, con los datos epidemiológicos de 2011, considera Zonas de Baja Prevalencia frente a la Tuberculosis Bovina a la totalidad de los territorios de las provincias de Albacete, Cuenca y Guadalajara. En el caso de Ciudad Real son Zonas de Baja Prevalencia las comarcas ganaderas de Manzanares y Valdepeñas y en Toledo las comarcas de Belvis de la Jara, Gálvez, Los Navalmorales, Madridejos, Ocaña, Quintanar de la Orden, Talavera de la Reina, Toledo, y Yuncos. En estas zonas se realizará un chequeo al año.
Contempla como Zonas de Alta Prevalencia frente a la Tuberculosis Bovina a las comarcas ganaderas de Almadén, Almodóvar del Campo, Calzada de Calatrava, Horcajo de los Montes, Malagón, Piedrabuena, Tomelloso y Villanueva de los Infantes, en Ciudad Real, y a las de Almorox, Mora, Torrijos y Oropesa, en la provincia de Toledo. En estas zonas se harán dos chequeos anuales.